Existen muchos tipos de limpiadores: el gel, bálsamo, crema, jabón… Hoy os voy a hablar de las pastillas de jabón traidicionales y los limpiadores espumosos agresivos y su uso en la rutina facial.
La limpieza es la parte más importante de la rutina de cuidado de la piel. La mayoría de problemas y desequilibrios de la piel nacen de una limpieza defectuosa. Sin una buena limpieza, efectiva pero suave con la piel, al resto de la rutina le va a faltar la base que necesita para funcionar correctamente.
La manera de limpiar del jabón y de los detergentes agresivos es mediante
tensioactivos
. Estos tensioactivos atacan la grasa, pero toda la grasa, incluso la que forma parte de la capa de protección natural de la piel. Dejan la piel desprotegida, irritada y seca (nos dejan ese efecto «tirante» en la piel).
El jabón tradicional (sodium estearate, sodium cocoate o potassium oleate) es muy alcalino, desestabiliza el manto ácido e irrita la piel. Otros detergentes agresivos, como:
- sodium lauryl sulfate
- sodium laureth sulfate
- dodecilbenceno sulfonato
Los encontrareis en la mayoría de limpiadores líquidos para la piel; y los encontrareis también en la mayoría de lavavajillas o detergentes para la ropa.
Debemos limpiar la piel, pero sin que se desequilibre ni se irrite. La mejor manera de hacerlo es mediante
limpiadores basados en aceites y/o libres de detergentes agresivos
, que respetan la capa de protección natural de la piel y la ayuden a mantener el equilibrio.
Este tipo de limpiadores son igual o incluso más
eficaces en la limpieza facial
, pero su forma de limpiar es diferente: los aceites por los que están formados atraen y captan la suciedad, residuos de maquillaje o el exceso de sebo, arrastrándola y eliminándola de la superficie de la piel. Incluso son capaces de penetrar y limpiar los poros. Pero no desequilibran la piel ni dañan su capa de protección natural. La piel queda limpia, pero no tirante, seca o enrojecida. Son especialmente imprescindibles para las pieles más sensibles.
Aunque estén basados en aceites, no son grasos. Hay varios tipos de limpiadores «buenos» y varias texturas. Puedes ver un pequeño resumen en esta entrada: Limpiadores: cuál, cómo y cúando..