Sabemos que la limpieza es la base para mantener una piel sana y bonita, que es sin ninguna duda crucial hacerla bien y hacerla 2 veces al día con los productos correctos. Que el estado de nuestra piel dependerá en gran medida de esta parte de la rutina. Y como nosotros no nos cansamos de insistir en ello, hoy os hablamos de la doble limpieza.
El origen de la doble limpieza se encuentra en Japón, era el ritual que llevaban a cabo las geishas cuando retiraban las pesadas capas de maquillaje y limpiaban sus rostro por la noche. La mayoría de nosotras no nos maquillamos como una geisha, pero si usamos varias capas de productos sobre la piel (hidratante, protección solar, maquillaje…) y al final del día, todas esas capas mezcladas con la transpiración, contaminación ambiental y la suciedad que nosotras mismas vamos depositando al tocarnos la cara a lo largo del día, acaba siendo un cóctel que efectivamente necesita la misma limpieza que el maquillaje de una geisha.
Doble limpieza: limpiar la cara 2 veces
Primera limpieza: La finalidad de este primer paso es eliminar las capas de producto, suciedad y sebo. Se usa un limpiador natural basado en aceites, tipo bálsamo, afín a las sustancias que queremos eliminar.
Se aplica el limpiador natural mediante masajes circulares en la piel de la cara, en las zonas más secas y más grasas por igual. Este limpiador lo puedes retirar con agua, con la ayuda de una esponja Konjac o un paño de muselina.
Segunda limpieza: El objetivo es retirar los restos del primer limpiador, limpiar la piel minuciosamente y dejarla 100% libre de impurezas. En este paso se usa un limpiador natural tipo gel, hidrófilo.
El limpiador se debe de empezar a aplicar en las zonas más grasas, haciendo más hincapié, y acabar en las zonas más secas. Se aclara con agua.
Y como en todo, hay excepciones. O, mejor dicho, un mejor ajuste de los productos en función del tipo de piel. Si quieres saber exactamente qué limpiadores son los mas adecuados para tu tipo de piel te recomiendo que leas el siguiente artículo: Limpiadores: cúal, cómo y cúando.
Beneficios de la doble limpieza
Con este método se consigue una limpieza más eficaz y profunda. Estamos usando 2 tipos diferentes de limpiadores siendo cada uno afín a un tipo diferente de suciedad.
Con la doble limpieza se consigue una limpieza en profundidad respetando la capa natural de protección de la piel, sin irritarla ni desequilibrarla. No se emplean productos agresivos ni accesorios que dañen la piel.
Una piel limpia y sana absorberá con mayor facilidad los principios activos de los tratamientos que le apliquemos: hidratantes, serums, mascarillas…
La doble limpieza es especialmente beneficiosa por la noche, cuando más sucia tenemos la piel.
Limpiadores para la doble limpieza
Para el primer paso se necesitan limpiadores lipófilos tipo bálsamo o crema, basados en aceites vegetales. Los limpiadores lipófilos son cremosos, con textura oleosa. Retiran muy bien la suciedad del tipo orgánica: maquillaje, sebo, restos de productos cosméticos, protectores solares, etc. Dentro de este tipo de limpiadores hay dos variantes: los que se pueden retirar con agua (que son más prácticos) y los que no se retiran sólo con agua y necesitan la ayuda de un paño de muselina (son más eficaces).
VER TODOS LOS LIMPIADORES LIPÓFILOS TIPO BÁLSAMO
VER TODOS LOS LIMPIADORES LIPÓFILOS TIPO CREMA
Los limpiadores del segundo paso son limpiadores hidrófilos: acuosos tipo gel. Los limpiadores hidrófilos son más eficaces con la suciedad inorgánica y con la suciedad orgánica moderada. Pueden llegar a hacer una ligera espuma y se retiran fácilmente con agua.<
VER TODOS LOS LIMPIADORES HIDRÓFILOS TIPO GEL
Mas info sobre limpiadores:
Limpiadores: cuál, cómo y cuándo
Aguas micelares, no tan recomendables.
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